
La ginecomastia es el agrandamiento o aumento del volumen de una o las dos mamas de los hombres. Los varones más sensibles a esta patología suelen tener entre 18 y 50 años de edad, con sobrepeso y un ligero crecimiento del pecho. Además, suelen ser personas con vida poco activa, más bien sedentaria.
¿Qué provoca la ginecomastia?
Generalmente se trata de un desequilibrio hormonal entre andrógenos y estrógenos. Aunque también es posible que se produzca por causas genéticas, tumorales o incluso a causa de algún medicamento.
Esta hipertrofia de los pechos también puede deberse a un simple exceso de grasa y, en todo caso, puede ser simétrico o asimétrico. Esto es, presentarse en una sola de las mamas o en ambas.
Aunque se trata de un problema básicamente estético, puede ser indicativo de una enfermedad subyacente endocrinológica o tumoral.
Patologías que provocan desequilibrio hormonal y causan ginecomastia pueden ser: enfermedades del riñón y de la glándula tiroidea, la cirrosis del hígado, los tumores del testículo o del pulmón o el síndrome de Klinefelter, la enfermedad de Addison o la distrofia miotónica de Steinert.
Ginecomastia y adipomastia
En la adipomastia el tejido mamario es blando a la palpación e incluso gelatinoso. Sin embargo, el tejido mamario de la ginecomastia es duro al tacto al tener un origen glandular.
El tratamiento de la ginecomastia puede requerir cirugía y posiblemente tratamiento psicológico, debido a la percepción de su imagen corporal.
¿Puede prevenirse?
No puede prevenirse, pero puede evitar el sobrepeso y practicar ejercicio para hacerlo menos evidente en la etapa de adolescente. Seguir una dieta saludable siempre es recomendable, así como realizar un estudio clínico para descartar trastornos endocrinos o cualquier otra patología.
Características.
En el paciente preadolescente, puede observarse una masa por debajo de la areola de consistencia dura y elástica.